Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

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100153
Legislatura: 1887-1888
Sesión: 28 de enero de 1888
Cámara: Senado
Discurso / Réplica: Réplica al Sr. Salamanca y Negrete.
Número y páginas del Diario de Sesiones: 38, 696-697.
Tema: Afirmaciones hechas por el Sr. Presidente del Consejo de Ministros en el Congreso de los Diputados al discutirse la contestación al Mensaje de la Corona.

El Sr. Presidente del Consejo de Ministros (Sagasta): ¿Ve S.S. como hablando se entienden las gentes? Ya voy comprendiendo lo que S.S. quiere decir.

Yo empiezo por declarar, que si a S.S. le lastima [696] la frase de ?no es verdad?, la doy por no dicha; pero si el Sr. Romero Robledo ha manifestado lo mismo que acaba de decir ahora S.S., declaro que no es exacto, porque lo que pasó fue lo siguiente. Su señoría, en el deseo de llevar un gobernador civil a la Habana, de toda su confianza y amigo suyo, me pidió que hiciera ese nombramiento, y el primer día que me lo propuso le dije: ?ese puesto no está vacante, en lo que lo están no le pongo a S.S. dificultar ninguna, puede pedírmelos y todos se los doy, porque lo que deseo es no ponerle dificultar ninguna en su gestión, sino al contrario, facilitársela; pero contra lo que S.S. cree, no existe vacante?. Entonces me dijo S.S.: ?si no está ese puesto vacante, debe estarlo, porque es un gobernador que ha faltado a sus deberes, pues ha hecho esto, lo otro y lo de más allá? (cosas que no creo debo repetir aquí). Contesté a S.S.: ?si es verdad eso, cuente también S.S. con esa vacante, porque en el acto será destituido; pero la cosa es grave y delicada, y permítame S.S. que tome antecedentes?.

En efecto; al día siguiente los tomé de todos los representantes de la isla de Cuba y de otras personas que conocen al interesado, y todos convinieron en que habrá habido en la Habana un gobernador tan honrado como aquél; pero más, ninguno. En la segunda conferencia que tuve con S.S., le dije: ?los informes de S.S. son equivocados, y siéndolo, permítame que no separe ahora al gobernador, porque, aparte de otras consideraciones, así como Vd. me recomienda a una persona de su confianza, el que nombró el actual Gobierno tiene también confianza en él y me pedirá explicaciones por su separación, mucho más, siendo por motivos que deshonran a un funcionario. Vaya Vd. allí, tome informes exactos, y si en efecto resultan acreditadas las noticias que usted tiene, el gobernador, a pesar de todo, será separado; pero si no, permítame que continúe desempeñando aquel destino durante los dos o tres años, que es el tiempo reglamentario. Esto es lo menos que se puede hacer con un empleado honrado, porque ya que su señoría va a purificar la administración de la isla, hay que tener consideración con un empleado como éste, si es honrado?. Esto es lo que pasó, y difiere no poco de lo que S.S. ha dicho; porque yo no manifesté que le sostuviera porque hubiese uno, dos o tres amigos que le recomendaban, sino porque las noticias que había adquirido eran contrarias a las de S.S. Si yo contesté al Sr. Romero Robledo (dado que lo explicara como S.S. lo ha hecho ahora) que no era exacto, a S.S. le digo lo mismo: que no es exacta la relación que ha hecho. [697]



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